El Santuario Nacional de Nuestra Señora de Guadalupe, un Tesoro Diocesanohis

El Santuario Nacional de Nuestra Señora de Guadalupe está ubicado en la Parroquia de la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen María (BVM por sus siglas en inglés) en Allentown.

Según la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), “un santuario se considera un lugar donde la gracia divina se manifiesta de una manera muy especial, un lugar donde se entrecruzan el mundo humano y el divino”.

“A la Conferencia de Obispos se le da la supervisión pastoral de los santuarios nacionales; se requiere su aprobación para que un santuario se llame nacional”.

El Arzobispo de la Ciudad de México propuso un Centro de Santuario Nacional al Obispo Sidney Metzger de El Paso, Texas en 1958, y el Santuario Nacional de Nuestra Señora de Guadalupe se estableció en 1974 en la Parroquia de la Inmaculada Concepción BVM, Allentown. La parroquia fue fundada en 1857 por el Obispo (ahora Santo) San John Neumann.

María, nuestra Santísima Madre, se apareció a un hombre indígena, Juan Diego en El Tepeyac, México, bajo el nombre de Nuestra Señora de Guadalupe en diciembre de 1531. Su aparición tuvo lugar en una época de opresión y en la que se ofrecían sacrificios humanos a los dioses paganos. Sus palabras a Juan Diego son verdaderas para todos sus hijos hoy:

“Sabe y ten entendido, tú el más pequeño de mis hijos, que yo soy la siempre Virgen María, Madre del verdadero Dios por quien se vive: del Creador de todo: Señor del cielo y de la tierra. Deseo vivamente que se me erija aquí un templo, para en él mostrar y dar todo mi amor, compasión, auxilio y defensa…”

“Pues yo soy vuestra piadosa madre, a ti, a todos vosotros juntos los moradores de esta tierra y a los demás amadores míos que me invoquen y en mi confíen.”

“Oiré allí sus lamentos y remediaré todas sus miserias, penas y dolores.”

María le pidió a Juan Diego que le dijera a su Obispo que construyera un santuario en el cerro del Tepeyac, y el Obispo le pidió una señal para acompañar la petición. Juan Diego volvió a ver a María, quien le indicó que fuera al cerro del Tepeyac a recoger flores. Era invierno, una época en que las flores no florecen. Juan Diego obedeció y encontró flores, incluidas rosas castellanas, que en ese momento no se cultivaban en México. Recogió las rosas y se las llevó a María, quien las colocó dentro de su tilma, un poncho con forma de capa, y se dirigió a ver al Obispo.

Al llegar frente al Obispo, abrió su tilma, y vio que en ella se había estampado milagrosamente una imagen de María. Esta era la señal que necesitaba el Obispo para confirmar la petición de María.

La Basílica de Nuestra Señora de Guadalupe en la Ciudad de México, donde ahora se exhibe la tilma, fue construida en 1973. Es el más visitado de todos los santuarios marianos.

Juan Diego fue beatificado por el Papa San Juan Pablo II en 1990 y canonizado como santo el 31 de julio de 2002.

“La marca distintiva de un santuario es que es un lugar al que los fieles peregrinan”, según la USCCB. Una peregrinación es un viaje realizado a un lugar sagrado, que simboliza nuestra vida en la Tierra mientras viajamos hacia la Eternidad.

Una de las razones por las que se eligió a la Inmaculada Concepción como el Santuario Nacional es porque está cerca de la Basílica del Santuario Nacional de la Inmaculada Concepción en Washington, D.C., donde se puede hacer una peregrinación fácilmente.

Nuestra Señora de Guadalupe se apareció a Juan Diego el 9 de diciembre, la fiesta de la Inmaculada Concepción en ese momento. Curiosamente, una Parroquia dedicada a su Inmaculada Concepción es el lugar elegido como Santuario Nacional de Nuestra Señora de Guadalupe.

El Papa Pío XII nombró a Nuestra Señora de Guadalupe Patrona de las Américas en 1946. Aunque su aparición ocurrió en México, ella es la madre de todos y Patrona de Norteamérica, Centroamérica y Sudamérica. Dado que Allentown no se encontraba en un área predominantemente de habla hispana, la invitación era para que la comunidad se diera cuenta de que Nuestra Señora de Guadalupe es para todos, no solo para los Latinos.

En 1999, el Papa San Juan Pablo II nombró a Nuestra Señora de Guadalupe Patrona de los No Nacidos. En su imagen, está embarazada del Niño Jesús. En su mensaje, se llama a sí misma Madre Misericordiosa de todos los pueblos. Llegó a una sociedad que no valoraba la vida humana, pero después de que ella llegó y dejó su imagen, los valores de las personas cambiaron. A los ocho años de su aparición, más de ocho millones de Mexicanos se convirtieron y recibieron el bautismo. Así como se terminó el sacrificio humano en México después de su aparición, esperamos que, por su intercesión, también se termine el sacrificio de bebés por medio del aborto. (CNA)

"¿No estoy yo aquí que soy tu Madre? ¿No estás bajo mi regazo?”

Durante una de las apariciones de María a Juan Diego, ella le habló con estas palabras de amor. Su voz nos invita a acercarnos a ella, a buscar su protección e intercesión.

El Padre John Gibbons, párroco de la Inmaculada Concepción BVM, compartió que alguien vino recientemente al santuario debido a problemas de salud en su familia. Se sintió impulsada a pedir ayuda a Nuestra Señora de Guadalupe y su familiar se curó.

Durante este verano, considera hacer una peregrinación al santuario y rezar ante la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe. Se tomaron tres fotos de la original en México, y la mejor foto de las tres se encuentra sobre un altar lateral en la Inmaculada Concepción BVM, dijo la Hermana Mary Martha Zammatore, miembro de las Hermanas de la Escuela de San Francisco y coordinadora del ministerio de prisión en la Diócesis.

Todos son bienvenidos a participar en la Novena Perpetua de Guadalupe, que se reza en comunidad los lunes después de la Misa de las 8 a.m. También pueden participar en el Rosario los martes antes de la Misa de las 8 a. m.

De manera especial, se reza una novena nueve días antes de la Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe el 12 de diciembre, y se celebra una Misa cada año en esa fecha o cerca de esa fecha acompañada de mariachis, comida Mexicana y bailes, dijo Miriam Bernal, miembro del Comité Guadalupano encargado de planificar los eventos en torno a la fiesta.



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